Tantas personas me dicen: «Meditar no es para mí» «Mi mente no se detiene» «Soy demasiado inquieto no me siento bien meditando» «Meditar me produce ansiedad» yo contesto: ¡Tú si puedes aprender a meditar!
Este tipo de comentarios surge mucho en estos tiempos porque nos hemos hecho una idea de la meditación errónea.
Meditar es más que poner la mente en blanco
Creemos que meditar es quedarse en postura de loto por un largo tiempo con la mente totalmente en blanco.
Vaya que expectativa tan alta para unos occidentales que muchas veces son poco flexibles, que llevan la mente a millón y que no saben que existen muchas formas de llevarse a un estado de presencia en si mismo, a un estado meditativo.
Un acto orgánico y natural
MEDITAR es un acto natural en el ser humano, surge de forma orgánica, es contemplar, es estar presente en ti, es darte cuenta de lo que estás sintiendo y viviendo. Ese estado de PRESENCIA surge cuando nos relajamos y estamos en calma.
Sin expectativas se aprende mejor
Entonces más que buscar aprender a meditar bajo la premisa de la busqueda del silencio mental y mantenernos por horas en loto, se trata de aprender a relajarnos, a observarnos, a reconocernos tal como somos y desde allí generar CALMA INTERNA, que vaya que se necesita en estos tiempos.
Tú si puedes aprender a meditar
Yo si creo qe tú puedes aprender a meditar, pero primero es necesario hacer amistad con tu mente y tu cuerpo y tomarte el tiempo de conocerlos.
Sostén grupal
En el Grupo de Meditación de los Miércoles a las 6.00 am hora Colombia nos reunimos en una Sala privada de Google Meet para aprender a generar esa relajación, esa concentración, esos movimientos y respiraciones que nos permiten estar presentes y quizás optar por ir hacia un acto más contemplativo que nos genere un poco de calma.